Una vez tienes todas las manos, está bien lijar las imperfecciones y las marcas de las juntas del molde. No es algo que sea muy imprescindible, porque al fin y al cabo tampoco van a ir a ninguna galería estas manos. Van a ir a la calle, donde probablemente alguien te la acabe robando, tirando, o simplemente rompiendo por joder (sí, tristemente esto también pasa). Pero también habrá mucha gente que las vea, las mire y las respete por lo que son, así que yo también le tengo un respeto a la calle y considero que no cuesta nada lijarlas un poco y ponerlas bien guapas.
La lija, como más bestia mejor, las púas bien salidas y afiladas sino te puedes pasar la vida lijando. El formón va bien para quitar las juntas y la lija para alisar la base.
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